Mentiroso (嘘つき Usotsuki?) es el capítulo #95 del manga Ataque a los Titanes. Fue escrito e ilustrado por Hajime Isayama.
Resumen[]
Reiner y Gabi recorren las calles de la zona de internamiento en Liberio, dirigiéndose a los cuarteles generales en el exterior del gueto. Por el camino, ambos son saludados por los ciudadanos eldianos del lugar, hasta que llegan a la salida de la zona de internamiento. Mientras presentan sus permisos a los guardias, uno de ellos pregunta a Gabi acerca de sus acciones durante la guerra contra Medio Oriente, pero la muchacha evade el tema y se limita a darle su permiso. Una vez Reiner y Gabi se retiran, el soldado marleyano, desconcertado, se pregunta el porqué del poco entusiasmo de Gabi. Su compañero opina que ella ha estado anormalmente silenciosa ese día.
Percatándose de la extraña actitud de sus prima, Reiner le pregunta a Gabi acerca de su desánimo. Gabi señala que es él quien está actuando de forma extraña y lo acusa de estar ocultando algo. Reiner no comprende, por lo que Gabi le explica que desde que regresó de Paradis, su tía Karina se percató de su cambio de actitud, indicando que se ha estado comportando como una persona completamente diferente. Reiner no le da mucha importancia, clamando que, tras haber pasado cinco años en Paradis, es natural que su madre se encuentre preocupada. Todavía sin creer en sus palabras, Gabi le pide a Reiner que le cuente la verdad algún día, y le recuerda que, según los científicos de Marley, los lazos sanguíneos tiene una fuerte influencia a la hora de heredar las memorias de uno de los nueve titanes, y si ella hereda el poder del Titán Acorazado, podrá comprender lo que él no puede explicar con palabras. Gabi está convencida de que si trabajan juntos, ambos podrán abrir una nueva senda para el futuro de Eldia.
En el campo de entrenamiento del cuartel general de los guerreros, Falco entrena frente a los desanimados Udo y Zofia, quienes se quejan de tener que haberse levantado tan temprano. Al ver a Reiner y Gabi acercarse, Falco recuerda que para protegerla, deberá sobrepasarla, y clama en voz alta que él heredará el poder del Titán Acorazado, lo que le hace recibir un cabezazo de Gabi, quien lo desafía a intentarlo.
En el interior del cuartel, Porco Galliard sube las escaleras, dirigiéndose a una reunión con el resto de guerreros. Una vez llega al segundo piso, se sorprende al ver a Pieck andando a gatas, de forma similar a su forma de titán. Pieck le explica que para ella es más fácil movilizarse así, pero Galliard, tras recuperarse del susto, le pide que camine erguida. Ambos llegan a la oficina de Zeke, donde éste se encuentra junto a Reiner y Colt. Galliard denota lo inusual que es para ellos reunirse sin la presencia de los oficiales marleyano, y pregunta acerca de ellos, pero Zeke le aclara que no se encuentran en la habitación. Una vez los recién llegados ocupan sus lugares, Zeke les explica el motivo de su reunión: A pesar de que ellos, los guerreros, han servido fielmente a Marley utilizando sus poderes de titán para aplacar a cualquier nación que se les opusiese, el rechazo mundial a los eldianos se ha incrementado de tal forma que recuerda a los antiguos días imperiales. Aunque no se equivocaron al demostrar su lealtad a Marley, cada vez son más quienes claman por el exterminio de todos los eldianos. Por si fuera poco, los recientes conflictos bélicos han demostrado que las armas convencionales pronto superaran al poder de los titanes, por lo que los eldianos pronto perderán su valor militar. Si Marley se debilita, las barreras que separan a los eldianos del resto del mundo desaparecerán, y el destino de toda su raza estará en peligro. Zeke plantea que, la única solución posible es que Marley tome control del poder del Titán Fundador y los recursos de Paradis; de ese modo, Marley no solo mantendrá su posición, sino que se deshará de la amenaza que Paradis representa.
Pieck considera que, aún si recuperaran el poder del Titán Fundador, la opinión pública respecto a los eldianos es tan negativa que es poco probable que algo cambie. Zeke está de acuerdo, y explica que lo importante es la historia que ellos cuenten. Para ello, necesitan que el mundo se percate de la verdadera amenaza que representa Paradis para todos, por lo que necesitarán un narrador: la familia Tybur, los poseedores del poder del Titán Martillo de Guerra. Los Tybur fueron la primera familia aristócrata que se opuso al 145° rey Fritz durante la Gran Guerra de los Titanes hace más de un siglo. Como ciudadanos honorarios marleyanos, los Tybur jamás intervinieron en asuntos políticos y bélicos, pero han accedido a tomar acción debido al incierto futuro de Marley y los eldianos. Pieck opina que, dado que los Tybur no han usado sus poderes contra naciones enemigas y tienen una gran influencia en otros países por haber luchado contra el 145° rey Fritz, el mundo definitivamente los escuchara. Por su parte, Galliard desconfía de los Tybur, quienes jamás han cumplido con su deber de defender a Marley y viven en lujosas mansiones, mientras el resto de eldianos han sido forzados a permanecer en zonas de internamiento. Zeke y Reiner sin embargo, consideran que si los Tybur están realmente preocupados por el futuro de Marley, trabajar junto a ellos es la mejor opción. Zeke le informa a los guerreros que un festival tomará lugar en Liberio dentro de poco, en donde la familia Tybur declarará a la prensa internacional que Paradis estará en control de Marley dentro de un año. El futuro de los eldianos y Marley recaerá en sus acciones, por lo que el fracaso no será tolerado.
En otra habitación, los oficiales marleyanos terminan de escuchar la conversación de los guerreros. Uno de ellos denota que Galliard parecía descontento con el plan, pero confía en que este se apegue a sus órdenes como siempre. Magath lamenta que Zeke hubiese lanzado "ese comentario". Devuelta en la oficina de Zeke, Reiner se percata de que sus superiores marleyanos habían escuchado su reunión a través de un gramófono, y que Zeke se los hizo saber al decirles que los oficiales no se encontraban "en esta habitación". Poco después, Reiner observa a los guerreros cadetes entrenar, y recuerda que, tal como en el pasado, sus superiores siempre examinan sus pensamientos e ideologías antes del inicio de una operación importante. Mientras con resignación, acepta que tendrá que retornar a Paradis, Reiner recuerda sus días como cadete, poco antes de la operación para recuperar el Titán Fundador.
En medio del campo de batalla, los seis guerreros elegidos por Marley emplean sus poderes contra una nación enemiga. Desde la distancia, los oficiales marleyanos evalúan el desempeño de los guerreros y la forma en la que emplean sus habilidades de titán. La Titán Hembra, capacitada en todos los campos, con gran movilidad y resistencia, además de habilidades de endurecimiento y la capacidad de llamar titanes puros con su rugido, se encuentra en posesión de Annie Leonhart. El Titán Acorazado, con un cuerpo recubierto de piel endurecida y la fuerza física necesaria para derribar las puertas de las murallas de Paradis, ha sido encomendado a Reiner Braun. El Titán Mandíbula, pequeño y ágil, puede emplear sus afiladas garras y dientes para destrozar cualquier cosa, lo que lo convierte en una unidad de asalto perfecta, por lo que ha sido asignado a Marcel Galliard. Zeke Jaeger, a quien ha sido otorgado el poder del Titán Bestia, no solo ha demostrado la devastadora capacidad de arrojar objetos con extrema fuerza y precisión, sino que posee un poder milagroso escondido en su sangre. El Titán Carguero, con su inusual resistencia, es ideal para misiones largas, por lo que se le puede equipar con diferentes tipos de armamento; Pieck, con su gran inteligencia, es perfecta para emplear el poder. Y el Titán Colosal, asignado a Bertolt Hoover, es un auténtico dios de la destrucción.
Uno de los oficiales marleyanos admite casi sentir simpatía por los habitantes de Paradis, ya que algún día el Titán Colosal aparecerá para exterminarlos. Magath está de acuerdo, y denota que la unidad de guerreros es más poderosa que nunca debido a que fueron entrenados desde la infancia, pero opina que la decisión de encargar una misión tan importante a un grupo de niños es una locura. No obstante, su compañero le recuerda que esos mismos niños acaban de arrasar con una nación entera.
Una vez llega el momento de planear la operación de recuperación del Titán Fundador, Magath informa que Zeke y Pieck no tomaran parte en la misión, pues se les requiere en Marley para prevenir el ataque de naciones enemigas. La responsabilidad de recapturar al Titán Fundador recaerá en Marcel, Reiner, Bertolt y Annie. Tras la reunión, Porco, enfurecido, se dirige a Reiner y demanda saber cómo se las arregló para ser elegido como portador de uno de los nueve poderes de titán, cuando era el peor entre todos los guerreros. Reiner le responde que, si no lo eligieron, es porque él debe de ser el peor. Porco intenta golpearlo, pero es detenido por su hermano Marcel, quien le dice que no debe desafiar la decisión del ejército de Marley. Antes de retirarse junto a su hermano, Marcel se disculpa con Reiner.
En las calles de la zona de internamiento de Liberio, se realiza un homenaje a los cuatro guerreros. Entre la multitud, Reiner detecta a un hombre, al que reconoce como su padre. Reiner lo sigue hasta la cocina donde trabaja, le hace saber quién es y le explica que él y su madre ahora serán honorarios ciudadanos marleyanos, por lo que finalmente los tres podrán vivir juntos como una familia. Su padre lo interrumpe, y a gritos, le dice que Karina probablemente lo envió para tomar venganza contra él, y que si las autoridades de Marley examinan sus orígenes, toda su familia estaría en peligro. Antes de echarlo del lugar, el padre de Reiner le aclara que seguirá huyendo de ellos a como dé lugar.
El día en que los guerreros se preparan para partir rumbo a Paradis, Reiner se despide de su madre. Ésta denota que su hijo está preocupado, pero le asegura que confía en él y que su padre estará rezando por el éxito de su misión. Mientras el bote parte y la gente se despide de ellos, Reiner piensa en que, sin importar que no tenga un padre que lo apoye, él ha sido escogido como el Titán Acorazado de Marley, y jura salvar al mundo de los "demonios" de Paradis y convertirse en un héroe.
Una vez los guerreros y los oficiales marleyanos llegan a la frontera de Paradis, Magath les explica la forma en que deben proceder: una vez el sol se ponga, deben moverse hacia el norte, y cuando recuperen al Titán Fundador, deben tener en cuenta que el ejército de Marley anclará en la frontera la noche de luna llena. Los guerreros inician la operación en la noche, dirigiéndose a las murallas a caballo, pero son forzados a acampar debido a la poca visibilidad. Conversando acerca de su misión, Bertolt teme que el rey de los muros use sus poderes una vez ataquen, y Marcel, resignado, clama que ya no hay marcha atrás para ellos. Reiner se preocupa al escuchar las dudas de sus compañeros, y les pide que recuerden el daño que los "demonios" de Paradis ocasionaron al mundo.
Repentinamente, Marcel se disculpa con Reiner, confesándole entre lágrimas que influenció la decisión del ejército para que lo eligieran a él como el Titán Acorazado en vez de a su hermano Porco, ya que quería protegerlo
Impactado al escuchar la verdad, Reiner no se percata, una vez amanece, que un titán acababa de emerger de la tierra, listo para devorarlo. Marcel lo empuja fuera del camino, salvándolo al costo de su propia vida. Mientras Marcel es devorado, Reiner huye despavorido junto a los otros guerreros, y jura una vez más que exterminará a los "demonios" de Paradis y se convertirá en un héroe que salvará al mundo entero.